Hacer la compra con niños: LA experiencia.

Hay que hacer un ejercicio mental para prepararse y estar en forma porque tienes carreras y movimientos de precisión varios asegurados, además de poner a prueba paciencia a raudales.
 

Hacer la compra con un niño con Autismo es la experiencia DEFINITIVA.
Si podemos evitarlo no llevamos a Rodrigo a comprar, es una situación tremendamente estresante para él y para nosotros. La sobreexposición a tanta cantidad y variedad de estímulos en un entorno tan pequeño le generan ansiedad y actitudes de rechazo, el cambiar el recorrido de los pasillos provoca explosiones conductuales, la espera en la caja resulta inviable ya que se escapa, grita y no comprende el porqué no puede seguir hacia delante.
Cuando llegamos a casa la sensación que nos inunda es la de liberación y desgaste máximos.
Por eso, ver iniciativas como la que Lidl Irlanda ha lanzado me llaman poderosamente la atención y considero necesarias para lograr que el colectivo de personas con TEA (y familiares) puedan realizar una tarea cotidiana como hacer la compra semanal en un entorno adaptado y controlado, garantizando una experiencia lo menos estresante posible.
 

Las «Autism Aware Quiet Evenings» son el colofón a una prueba piloto que resultó ser un éxito.
Las 194 tiendas de la cadena situadas en Irlanda comenzarán a implementar estos ajustes sensoriales, aprovechando la celebración del día mundial para la concienciación del autismo el 2 de abril, todos los martes entre las 6 p.m. y las 8 p.m. de forma progresiva. La dirección espera que que el despliegue completo se complete en todas las tiendas en mayo.
Las medidas adoptadas son:

– Iluminación reducida.

– Ausencia de anuncios en la tienda

– No hay música ambiente.

– Cola de prioridad para los clientes con TEA así como asistencia adicional si se solicita.

– Sonido del escaneo de productos más bajo.

– Aceptación en los locales de los perros de asistencia.

Cartel con características de las tiendas lidl con horas en silencio
La idea es crear un entorno más tranquilo.
 

Desde la gerencia de Lidl se ha trabajado con Autismo Irlanda para garantizar que la organización de estas tardes se ajusten a las necesidades de los potenciales clientes dentro del espectro. Además, invitan a cualquier asociación interesada a aprovechar esas horas para promocionar en los establecimientos sus trabajos y crear conciencia sobre este trastorno.
 

Mapa de una tienda lidl indicando zonas fríass, zonas que no deben tocarse,,etc
 

Las primeras experiencias piloto han sido muy positivas aunque la critica, por llamarlo de alguna manera, más común ha sido la velocidad del escaneo. Todos hemos experimentado esa sensación cuando los productos circulan por la cinta y se van acumulando al final de la misma. Abrumadora.¿Quién no se ha visto metiendo los botes y latas deprisa y corriendo en las bolsas?
Esta misma situación puede ser un detonante estresor en una persona con Autismo. Para ello se plantea esa reducción de la velocidad de la cinta, de las personas de caja, la concienciación de los trabajadores y la ayuda de personal de la tienda.
 

¿Qué os parece esta iniciativa? ¿La veríais aplicable en los hipermercados españoles? ¿Añadiríais algo?